• Traslado del retablo de la Cofradía de Ánimas a la Capilla de S.Roque en 1843 ( y II )

    17 junio 2023 • Blog

    En el año 1841 ejercía el cargo de mayordomo de la Cofradía de Ánimas el comerciante Julián Golpe Pérez, quien con su mujer María da Pena regentaban una tienda de comestible y quincalla en la casa que habitaban en la calle de los Plateros nº 10. Era hijo de Domingo Ignacio Golpe y de Dominga Pérez, difuntos y vecinos que fueron de Verines de donde era natural, y María era hija de José da Pena y Josefa García, vecinos que fueron de San Salvador de Villouzás, ambas feligresías pertenecientes a la antigua Jurisdicción Real de Betanzos y su Tierra de las Mariñas, la que en primeras nupcias estuvo casada con Juan Sosa, con el que tuvo a María que casó en Betanzos con Francisco Bujía, y en segundas nupcias con Julián tuvieron a María Antonia, Francisco y Josefa, solteros y en su compañía. Otorgaron sus últimas voluntades en esta ciudad el 27 de marzo de 1844, y testamento en el que hicieron constar:

    «… Lo propio declaramos tener en dicha nuestra Casa algunas ropas, zera y Alajas de la cofradia de Animas, que esta erigida en la Yglesia del Conbento extinguido de Santo Domingo de esta ciudad, de que ultimamente yo el Julian he sido mayordomo; las cuales recojí con motivo de estar determinado derribar dha Yglesia y Conbento; por lo mismo si en nuestra vida no se bolbiesen a aquella Mandamos se entreguen a la persona que represente los derechos de la enunciada Cofradia y Capilla por ser bien conocidas…«. (Archivo Notarial de la Coruña. Protocolo 3.695, folio 29, del escribano Antonio Tomé del número de Betanzos. Publicado en nuestra obra Morfología Urbana de Betanzos de los Caballeros- Intramuros- Aproximación documental, Betanzos 2023, edición del autor. Tomo II, página 924).

    Asimismo declaran que compraron y reedificaron «… una casa sita en la calle de la Rua Trabiesa que bendio judicialmente por la Essniª. de Numero que ejerce Dn. José Rodriguez Contas que ha sido de Dn José Baliela… quando la adquirio en plazuela y aun le falta por concluirla…». (Ibídem. Ob.cit. Tomo II, págs., 784 y 936).

    Lo más importante es que debido a la devota prevención de los responsables de dicha Cofradía, según se ha visto, pudieron salvar sus enseres y volver a ser utilizados para el servicio y culto en su Capilla de la iglesia de Santo Domingo.

    A pesar de las precauciones, es comprensible que con tanto trajín el retablo del Santo Cristo y de las Ánimas del Purgatorio sufriera notables deterioros, de manera que una vez restablecidos el orden y la concordia con el retorno desde la Capilla de San Roque a la Capilla central del ala Norte de la iglesia de Santo Domingo de Betanzos (Vid. la entrada Fábrica de las Capillas de Ánimas y del Rosario de Santo Domingo de Betanzos (I), del 10 de febrero de 2023), los cofrades de la Cofradía de las Ánimas del Purgatorio se dispusieron a recuperar su antigua apariencia y esplendor con el pintado del retablo.

    En la parte posterior de la puerta de la izquierda del retablo existe una inscripción elíptica al pincel, inédita hasta el presente, de 38’5 centímetros de alto por 50 de ancho, en la que consta que fue pintado por el artista don Francisco Atienza en 1850, quien la subscribe del tenor siguiente:

    « Enlos Meses Julio y Agosto del Año 1850. se ha pintado este Altar de las Animas Por Cuenta delos fondos del legado que Al objeto dejaron a la Cofradía Dn. Gregorio Edreira y su Muger Dª Bernarda Calbelo (Q.E.P.D.); siendo Mayordomo Dn Jacobo Pedreira y fiscal Dn. Simón Francº. Ramos y Comisionados Para la obra de estos En union los Cofrades Dn. Ramon Garcia Couseiro y Dn. Juan Arines Montenegro, Previa interbencion del Sr. Juez eclesiastico el Licenciado Dn. Manuel Saldos Requero Cura y Rector Propio dela Parroquia del Sr. Sn. Tiago Matriz y Principal desta Ciudad y anejo Sn. Martin de Brabio, (Lapintura Esta al Olio por lo que Podrá labarse Esecto las imagenes y dorado qe. Seallan Al barnis; El Artista. [Firmado]. Dn. Francº. Atienza. [Rúbrica].«.

    Los citados don Gregorio Edreira Díaz, Capitán del Batallón de Voluntarios Realistas de Betanzos y Diputado del Común, era hijo de Ángel Edreira Alfeirán, propietario de una fábrica de curtidos en esta ciudad, y de María Díaz Caurel, y casó con doña Bernarda López Calvelo. Por el testamento que Ángel Edreira y su mujer otorgaron en Betanzos, el 26 de diciembre de 1809, disponía «… y se le de sepultura en las que pareciere a nuestros cumplidores dentro de la Capilla de Animas de la Yglesia Combentual del Patriarca Santo Domingo de esta Ciudad, siempre que este entonces havilitada o reconciliada por la profanacion que en ella han echo los soldados del Ejercito Frances que inbabio este Reino…», y si no en la de Santiago de donde son feligreses, y nombran heredero a su único hijo Gregorio Edreira, que con su mujer habitan en su compañía (Archivo Notarial de La Coruña. Protocolo 2.987, folio 296, del escribano Pedro González y Naveira del número de Betanzos). Lo mismo que mandan en el otro testamento que otorgaron en Betanzos el 19 de abril de 1817, al disponer que quieren ser sepultados en la Capilla de Ánimas de Santo Domingo (Ibídem. Protocolo 3.460, folio 109, del escribano Nicolás de Ponte y Varela del número de Betanzos). Durante el Trienio Liberal, el 30 de abril de 1821 fue arrestado junto otros realistas de Betanzos, además de un fraile dominico del convento de la localidad, y fueron trasladados a la prisión de Paso Alto en Santa Cruz de Tenerife. No es de extrañar que su único hijo y por tanto universal heredero, hubiese dejado un legado a favor de dicha cofradía, tal como consta en la anterior inscripción.

    El mayordomo don Jacobo Pedreira, regidor, oficial sastre y comerciante de paños en Betanzos, estaba casado con doña María Pérez, habitaban en el nº 41 de la Rúa Nueva y eran propietarios entre otras de la casa nº 23 de la calle de la Plaza de dominio directo del convento de Santo Domingo, con la que tuvo por primogénito a Antonio, que falleció a los veinticinco años de edad, dejando viuda a María Navaza, hija del calderero Pedro Navaza; también procrearon a Josefa casada en esta ciudad con Juan Álvarez, comerciante natural de San Esteban de Sorbeira en los Ancares, y a Manuel y Andrés, Cadete en el 3º Batallón del Regimiento de Castilla 16 de linea, solteros y menores de edad en su compañía (Ibídem. Protocolo 3.773, folio 78, del escribano Manuel José Couceiro del número de Betanzos).

    Retablo del Santo Cristo y de las Ánimas del Purgatorio de Santo Domingo de Betanzos. Archivo del autor.

    El Fiscal don Simón Francisco Ramos, platero, sería regidor del Concejo, era hijo de don Juan Victorio Ramos Varela y de doña Rita Araújo Rodríguez, estaba casado con doña Manuela Ares, y habitaban en la calle de los Plateros nº 15. De su padre heredó la casa situada enfrente del Puente Nuevo, segunda desde la Puerta de su nombre hacia el Valdoncel, gravada con treinta reales de vellón para misas a favor de la  Cofradía de Ánimas, otorgó sus últimas voluntades en Betanzos el 14 de octubre de 1851 (Ibídem. Protocolo 3.723, folio 180, del escribano José Domingo Meás del número de Betanzos). Don Simón Francisco y doña Manuela tuvieron por hijos a don Agapito Ramos Ares, Capitán de Infantería, a don Juan empleado en el Cuerpo de Carabineros y a doña Antonia que casó con don Francisco de Castro, que viven en su compañía y procrearon a Felipe y Manuel. Era sobrino de don José Antonio Ramos Varela, Corregidor que fue de la Provincia del Chocó de Indias, que dejó heredero a su hermano don Juan Victorio, quien con doña Rita también procrearon a don José Bartolomé, residente en Cartagena de Indias en 1796.

    Por lo que respecta al cofrade don Ramón García Couceiro (escrito Couseiro en dicho óvalo), nació en Betanzos el 25 de junio de 1806 y fue bautizado al día siguiente en la iglesia de Santiago, escribano de número de la ciudad de Betanzos y escribanía que recibió por herencia de su madre, era hijo de don Benito Manuel García Pérez, escribano de Ayuntamiento y número de Betanzos, y de doña Cayetana Antonia Sánchez Couceiro, con domicilio en los soportales del Campo nº 36, quienes tuvieron también a doña Ana que casó con don Juan Vázquez Chao, la que otorgó sus últimas voluntades en Betanzos, en estado de viuda, el 10 de marzo de 1837, y testamento por el que nombra a su hija doña Juanita de 14 años heredera universal (Ibídem. Protocolo 3.590, folio 74, del escribano Andrés Peón del número de Betanzos).

    En cuánto al cofrade don Juan Arines Montenegro, escribano, cacique local y líder de los conservadores, era hijo de don Juan Arines Troncoso, natural de Redondela, y de doña María Ramona Fernández Montenegro y Chas, natural de Betanzos, casó el 3 de abril de 1848 en la iglesia de Santiago de Betanzos, con doña Rafaela de Lago, hija de don Rafael de Lago y de doña María de Soto (Archivo Diocesano de Santiago. Libro de Casados de Santiago de Betanzos L.S. 20, folio 240) con la que no tuvo descendencia, y habitaban la casa nº 2 de la calle de Arriba de Cachiñas y nº 37 de la Plaza del Campo, lindante y con fachada al Cantón Grande. Sus padres también tuvieron a doña Rita y a don Francisco, ella casó en Betanzos con don Manuel García Verea, tío y padrino del liberal republicano, periodista, profesor e intelectual brigantino don Manuel García Failde (Ibídem. Folio 240 vº), propietario de la casa conocida como de la Burata, sita en la calle de Arriba de Cachiñas. De su gran valimiento en esta ciudad, es buen ejemplo que en la sesión municipal del 3 de mayo de 1897 se acordó poner a la Plaza del Campo «… el nombre de Plaza de Arines…».

    Y por último el castellano don Manuel Saldos Recuero, de 37 años de edad, Rector de la iglesia de Santiago y su anexo San Martín de Brabío, habitaba el nº 34 de los soportales del Campo juntamente con su hermana doña Carlota, de 27 años de edad, y el servicio doméstico.

    Seguiremos en la brecha para dar a conocer, a través de nuevas entradas en esta página, los esfuerzos de la Cofradía para recuperar su antiguo apogeo y proseguir con el cumplimiento de las fundaciones más significativas establecidas desde el siglo XVII.