Arreglo del órgano de Sto. Domingo para servicio de la iglesia de Santiago en 1840
11 abril 2020 • Blog
La generalizada destrucción de los elementos más importantes de las iglesias y monasterios de Betanzos por los franceses en 1809, es decir en los ciento sesenta y tres días de la ocupación de esta ciudad y su provincia hasta su retirada el 23 de junio de dicho año, además de haber saqueado y quemado la mayor parte de sus edificios públicos y privados durante todo este tiempo, no sólo dejó en la ruina a la mayor parte de sus habitantes sino que generó la pérdida de los fondos de las instituciones y de los organismos. En este terreno fue preciso empeñarse en la tremenda tarea de recuperación del patrimonio perdido, que en referencia al eclesiástico comprendía el destrozo sino la pérdida de retablos, imágenes, ajuares y hasta los órganos de las iglesias de que vamos a tratar.
En nuestra obra La Ocupación de Betanzos y su Tierra por los Franceses en 1809 (Editada en 2013 por el Ayuntamiento de Betanzos, Gadis y Abanca), nos hemos preocupado de todos aquellos extremos y en particular del destrozo de tan notables instrumentos musicales, cuya importante función resulta fundamental para las ceremonias litúrgicas de mayor solemnidad y relieve, con el único y candoroso fin de enaltecer el culto divino. Pues bien, las iglesias se quedaron sin órganos y transcurridos treinta años se pretende restaurar lo que queda del existente en la iglesia del Convento de Santo Domingo, habida cuenta que el Ayuntamiento ha solicitado el derribo de este monumento a la superioridad (Remitimos a la entrada en esta web Derribo de monumentos por los liberales en el siglo XIX, del 5 de septiembre de 2016), para suplir el derrocado por los gabachos en la iglesia de Santiago, matriz de la Ciudad.
Transcurridos treinta años de aquella ocupación, se formaliza en Betanzos el 23 de enero de 1840 por ante escribano una escritura de convenio, por la que el licenciado don Manuel Saldos Recuero, cura y rector de la parroquia de Santiago y de su anexo San Martín de Brabío, y el sastre don Antonio Caramés como mayordomo fabriquero de la misma, contratan al maestro organero don José Vicente Bedós, vecino de la ciudad de Lugo, en cuya catedral había participado en la composición del órgano del Evangelio, para:
«… colocar el que se hallaba existente en la Yglesia del combento de Santo Domingo enla dela citada Parroquia de Santiago… satisfaciéndole por su Trabajo y obras que necesita hacer la cantidad de Seis mil rrs. por una vez en tres plazos… y en consecuencia… el Dn. Jose Vicente Bedós de colocar el citado Organo que fue dela Yglesia citada de Santo Domingo, enla referida Parrª. de Santiago de esta Ciudad en el sitio que ya está destinado al efecto, el cual pondrá corrte. del todo arreglado, y afinado en forma con sus fuelles en el Termnº. preciso de cinco meses contados desde hoy dia haciendo las obras que al intento se necesiten, y solo el Dn Manl Ricuero (sic) y el Carames le han de entregar Catorce Trompas de Lenguateria delas esteriores que faltan pª. el completo del mismo Organo siendo de cuenta del sobre dho arreglarlas y ponerles las Boquillas y finalmente no queda al Cura y Fabriquero otra obligacion de suministrarle la menor cosa: Quienes tambien se obligan con sus pnªs y vienes de satisfacerle… Dos mil de ellos al principiar la obra, otros Dos mil para cuando esta se halle enla mitad de su Trabajo, y los otros Dos mil restantes de concluida que sea, y a tiempo que dho Organo esté corriente para tocar sin faltarle cosa alguna, pero antes ha de ser reconocido por otro Maestro del arte que diga y declare hallarse perfectamente colocado y en disposicion de poderse hacer uso de el en los obgetos aque es destinado y que nose halle conla mas lebe falta pues que en este caso queda de cuenta del Bedós susanar los defectos quese notasen hasta tanto que asi no preceda no ha de poder recibir el resto de dhos Dos mil rrs. En cuya conformidad Celebran el presente conbenio por cuio tenor estaran y pasaran atodo tiempo de siempre Jamás, lo cumpliran y ejecutaran, cada cual lo que queda constituido sopena de que aello sean obligados y compelidos por el rigor de derecho con satisfacción de costas daños y perjuicios que en contrabencion aello dieren lugar… Asilo digeron otorgan y firman de sus nombres siendo testºs. (testigos) prestes. (presentes) Jacinto Garcia, José Veiga y Marcos Manl. Campos vecinos de esta ciudad. Delo qual y de que conozco alas partes yo Essno doy fee. [Firmado]. L. Manuel Saldos Recuero, Antonio Carames, Jose Vicente Bedós.[Rúbricas]. Ante mi.[Firmado]. Antonio Tomé.[Rúbrica]. drcºs (derechos) 8 r. «. (Archivo Notarial de La Coruña. Protocolo 3.691, folio 3, del escribano Antonio Tomé, del número de Betanzos).
No cabe duda de que se procedía a la salvación del instrumento, puesto que de no llevarse a efecto el traslado la pérdida sería mayor que la generada por los franceses, como sucedió con el derribo del monasterio de San Francisco y su monumental claustro medieval por esta misma época, amén de la quema de su iglesia y convento en 1936 (Vid., la entrada de esta web Nuevo Órgano para la iglesia de San Francisco de Betanzos en 1753, del 29 de octubre de 2019).
El primer gran paso ya estaba superado, aunque se presentaba un nuevo reto y nada menos que el de sostener un organista que se encargara de ejercer su oficio en las distintas iglesias parroquiales de la población, a cuyo efecto los abades subscriben y presentan una petición dirigida a la Corporación municipal, con fecha 23 de junio de 1841, en la que solicitan su colaboración para hacer frente al pago de su salario. Esta instancia fue tratada en la sesión del ayuntamiento del siguiente día 26, presidida por el alcalde don Celestino Martínez del Río, en cuya acta consta que:
«… Se ha visto una esposicion qe hacen con fha veinte y tres del corriente los Curas Parrocos de las parroquias de Santiago y Santa María de esta Ciudad Dn. Manuel Saldos Recuero y Dn. Andrés Freire, por la que suplican á la Corporaºn se digne la misma contribuir con aquella cantidad que su vondad le dicte pª poder sostener un organista que toque y cuide de los organos de las respectivas parroquias resultando de ello un veneficio conocido á la Corporacion por cuanto las funciones que tiene de Yglesia se podran celebrar con mas solemnidad, especialmente cuando las Fabricas de sus Yglesias estan pobres y escasas de fondos pª sostener dicho organista, acuerda se elebe con reconrendacion (sic) á S.E. la Diputación Provincial para que se sirva aprobar que el sobrante de los fondos de propios y arbitrios se entregue anualmente al organista que elijan, real y medio diario para ayuda de su dotacion á calidad de que el Procurador General del Ayuntamiento ha de tener voto en el nombramiento de la persona que se contrate pª. tal organista estendiendose hasta tanto que las Cortes acuerden acerca del modo (acerca del modo) de subenir á las atenciones del culto y clero á cuyo tiempo cesará el subsidio que ba propuesto…». (Archivo Municipal de Betanzos. Actas Capitulares. Caja 23, sin catalogar).
La Administración Pública no disponía de medios suficientes para hacer frente a las necesidades de la Ciudad, de ahí que para cualquier inversión extraordinaria tuviera que contar con la pertinente autorización de la Diputación (Vid., la entrada de esta web Apuntes Históricos de Betanzos: Administración Municipal, del 14 de abril de 2019), como se trata en esta ocasión para la ayuda de costa al organista de la Iglesia.
Medio siglo después y entre las muchas barbaridades ejecutadas a finales del siglo XIX en la iglesia de Santiago por el párroco don Cándido Alvarellos, según manifiesta don Francisco Javier Martínez Santiso al relacionar los muchos » disparates y profanaciones » de que fue promotor, y en una de sus crónicas contemporáneas manuscritas señala al respecto que «… Destruyó el Órgano que se había traído del Convento de Stº. Domingo después de la exclaustración…» (Original del archivo particular del autor).
Es de esperar el apoyo de las autoridades y de la ciudadanía en general a favor de don Santiago Pérez González, actual párroco de la Unidad Pastoral de Betanzos, en su proyecto y gestiones encaminados a la consecución de un órgano para instalar en uno de los majestuosos templos que atesora la Capital de Las Mariñas.